Los colombianos no somo tan ingenuos.

El problema de las guerrillas es de los colombianos y somos nosotros quienes tenemos que resolverlo, esto es al decir de los comentaristas de izquierda lo que piensan los dirigentes internacionales y que del el mismo criterio son la mayoría de los columnistas políticos en los grandes medios de comunicación. Y como tragamos entero nos vamos comiendo el cuento. Pero la cosa no es así. No hay que leer entre líneas, basta con seguir los discursos presidenciales de Chávez para saber por donde va el agua al molino. La expansión de la llamada Revolución Bolivariana es un hecho, y sus huestes pueden crecer con solo expedir la cédula de ciudadanía del hermano país a los guerrilleros de la Farc y el ELN que están en su suelo y luego incorporarlos a sus milicias para posteriormente enviarlos a la frontera con Colombia y como conocen bien nuestro territorio le servirán de punta de punta de lanza para cualquier incursión armada en uno cualquiera de los departamentos fronterizos. Para los colombianos las guerrillas si tienen el alcance de una amenaza terrorista internacional pues si bien están menguadas, pueden ser incorporadas a ejercitos extranjerons en Brazil, Bolivia, Ecuardor y Venezuela para fines de internacionalización del socialismo del siglo XXI, a sangre y fuego. Excúseme amigo lector estas divagaciones son fruto de una pesadilla que acabo de tener, después de leer a León Valencia y como consecuencia quizá de la orfandad que empiezo a sentir a tan pocos días del fin del gobierno del presidente Uribe.

con referencia a:

"En el caso venezolano tiene para mostrar declaraciones de comprensión o simpatía con ideas de la guerrilla expresadas en algún momento por el propio Chávez o por algún funcionario de su gobierno."
- Un plan de paz para Colombia - El Colombiano (ver en Google Sidewiki)